Desde octubre del año pasado, el Partido Socialista venía remontando poco a poco la desventaja que sufría respecto al Partido Popular tras las elecciones de Andalucía. En septiembre había tocado fondo con un 24,2% de respaldo y llegó a recuperarse hasta el 25,9% para cerrar a solo 3,2 puntos la ventaja de los populares. Sin embargo, el año nuevo y el castigo de los votantes por las reformas judiciales que ha intentado sacar adelante el gobierno de Pedro Sánchez han vuelto a hundir a los socialistas.

Según el panel de enero de Sigma Dos para El Mundo, el apoyo al partido de gobierno cayó más de un punto y se sitúa ahora en 24,8%, a la vez que el respaldo al PP subió 1,8 puntos y se ubica ahora en 30,9%. La brecha entre ambos ha aumentado ahora hasta los 5,2 puntos.

Vox también ha incrementado su respaldo al pasar de 14,9% a 16,2% de intención de voto. La mejora hace que los dos partidos de derecha sumen entre ambos 187 escaños, 11 más de los que necesitarían para formar gobierno. Ciudadanos perdería su representación parlamentaria al quedarse solo en un 1,7% de apoyo, pero eso no cambia en nada el escenario político.

Por su parte, el otro partido de gobierno, Podemos, sufre también una dura caída. Tras mantenerse estable sobre el 10% de apoyo durante casi todo 2022, las luchas internas parecen pasarle factura y ahora baja al 9,6%. Perdería 11 escaños y quedaría solo con 22 diputados.

¿Socialistas con Feijóo?

Nuevamente se repite la situación que se vio en verano tras las elecciones andaluzas: el PP empieza a morder en la base del PSOE y le resta votos. Alrededor de 625.000 votantes que en noviembre de 2019 contribuyeron a que el Pedro Sánchez siguiera al frente de La Moncloa optarían ahora por la papeleta de la oposición.

Otro 11,9%, que equivale a alrededor de 808.000 electores, se muestra indeciso ante las próximas generales, que se celebrarán a finales de este año en una fecha aún por definir.

Según el sondeo, el PSOE conservaría el 70,2% de sus votos frente al 78,8% de Vox y el 77,4% del PP, que tienen los electores más fieles de todo el espectro político. En el lado diametralmente opuesto se sitúa Ciudadanos, que apenas conservaría el 17,5% del apoyo que recibió en 2019.