Decía el sociólogo norteamericano Paul Watzlawick que “no es posible no comunicar”. Su afirmación se sustenta en la premisa de que todo comportamiento es una forma de comunicación. Cualquier persona o cualquier organización –como por ejemplo, una empresa- está en constante emisión de señales. Hoy, con Internet, con las nuevas tecnologías de la comunicación, más que nunca.
Si antes la comunicación corporativa era un coto privado de las grandes compañías que podían permitírselo, hoy es una necesidad también para las Pymes. No comunicar de manera profesional es no existir. O peor aún, dejar que otros informen sobre ti. Perder el control de tu propia imagen, de la percepción de que tus clientes (pero también tus proveedores y los demás públicos objetivos) tienen de ti.
Estamos de acuerdo en que todas las empresas deben ya tomarse en serio este asunto. La reputación es algo demasiado sensible como para dejar este tema de lado. Ni el desconocimiento de esta materia, ni el coste, deberían ser ya un problema.
Sin embargo, ¿qué puede hacer en comunicación una cooperativa mediana, por ejemplo, de producción de aceite, o una asociación de exportadores con una estructura limitada?
Sin duda, solución pasa por la externalización. Un adecuado “outsourcing” de este servicio puede dar la cobertura que una organización de este tipo necesita, sin tener por ello que crear un departamento propio de comunicación.
Por ello, hemos creado recientemente Sigma Dos Comunicación. El objetivo es ofrecer un servicio de comunicación corporativa que cubra las nuevas necesidades de empresas y organizaciones que se ven ante la necesidad de contar con una política continuada de comunicación, pero que por su ámbito de actividad no tienen tradición de hacerlo.
Un servicio bien dimensionado en precio pero sujeto a logro de objetivos definidos y siguiendo una estrategia diseñada específicamente para cliente.
¿Qué tenemos en Sigma Dos Comunicación?
– Consultores en comunicación con amplia experiencia en comunicación empresarial y política
– Tecnología: Apps y creación de páginas web.
– Contacto con los medios de comunicación, que nos permite una amplia y contrastada reputación empresarial.
– Conocimiento de la sociedad y el mercado, que nos proporcionan una larga trayectoria en el análisis demoscópico.
Muchos elementos se juntan para crear valor en torno a la comunicación. Y sobre todo, para ser capaces de diseñar la estrategia que cada organización, sea empresarial o pública, necesita, y hacerlo con precios muy competitivos.